Me han preguntado varias veces sobre el origen del blog,
es decir, ¿qué quiere decir “El ostracismo de Caronte”? y ¿por qué el
ostracismo de Caronte? Bien, como ya sois un nutrido grupo de lectores, los que
seguís el blog, aunque a mí siempre me pareceréis pocos, considero que ha
llegado el momento de desvelar los orígenes del blog y el porqué de su
naturaleza. El Ostracismo de Caronte nace con la convergencia de dos aspectos
que ocupan apartados muy especiales de mi vida y que recorren el mismo camino, el
profesional y, llamémosle así, el espiritual... Vamos a ir por partes.
En lo concerniente al ámbito profesional, pues que
deciros. Siempre, desde muy pequeño, he
encontrado en la lectura y en la escritura una vía de escape, un mundo mágico
de ideas y de inspiración, que arengaba mi imaginación, llegando a ser tan
fuerte que me creaba universos paralelos. Lo cierto es que todo el mundo tiene
derecho a ser feliz y no hallaría mayor felicidad que poder vivir haciendo lo
que más me gusta, escribir. Hasta hace poco, había trabajado de redactor
publicitario, elaborando guías de turismo, documentando páginas web de
historia, arte y cultura, guiones de vídeos, etc. En ese momento decidí dar un
impulso a mis propios trabajos. El
ostracismo de Caronte empieza a cobrar vida con la posibilidad de hacerme
conocer antes de publicar nada, es decir, que aquel que comprara mis libros,
supiese lo que estaba comprando.
La otra razón que configura El ostracismo de Caronte, se
descubre con un motivo más romántico. Esa inquietud, que “arrastro” desde
pequeño, de poder transmitir mis sentimientos que estalla por condensación de
ideas. Es el momento de desvelar mis sueños, mis emociones, y ¡porque no!, mis
frustraciones y mi rabia contenida y me dejo llevar, porque estoy convencido
que hay una “inmensa minoría” que percibe la realidad como lo hago yo. La idea
de expresarme con libertad encuentra en internet el mejor aliado, capaz de transportar
mis ideas por todo el mundo, y no hablo en vano, pues el treinta por ciento de
mis lectores son norteamericanos.
Con todo esto, pasamos al último punto de vuestras
inquietudes, ¿por qué El ostracismo de Caronte? Consideremos que el ser humano
tiene una intención divina, que llega a extralimitar su capacidad. Es decir, no
hay nada más natural que la muerte y, aunque no nos guste, hemos de aceptarlo.
No somos capaces de entender nuestro destino y luchamos fervientemente contra
ello. Pero lo peor de todo es esa intensidad que vertemos en el destino final y que no nos deja disfrutar de lo que actualmente tenemos. Es como si
imaginásemos que no podemos tener el mismo fin que los otros seres inferiores,
la muerte final. Añadimos alicientes, dioses, a nuestra vida, atacamos la
naturaleza con la ciencia y no nos damos cuenta que con ello precipitamos
nuestro destino. Cuanto más alejamos a Caronte de nuestro lado con más fuerza
le llamamos en nuestro futuro. En definitiva, condenar lo inevitable al
ostracismo no está en la mano del humano, lo puede retardar, pero…
Con este punto de vista desarrollé un blog sin
condiciones ni tapujos. Escribía sobre una frágil base que era lo que me parecía. No he definido el blog, ni espero hacerlo. Los temas concretos los encontrareis en los libros que espero publicar. En este devenir me encontré con Luis Pérez Armiño, gran amigo mio
y un enorme comunicador como habéis podido ver. Decidió colaborar conmigo y
poco más os puedo decir, todos los domingos y espero, además, que en colaboraciones mutuas os ofrezca todo lo que puede dar, que es mucho, creedme. El resto queda de vuestra mano.
Por cierto, espero que algún día Cesar Tezza comience a colgar
todos los sábados alguna de sus inquietudes, estoy en ello. Es un flamante
poeta, como podréis ver en mi artículo; la Vida, como poema. Espero haberos resuelto todo tipo de dudas. Ya no hay
secretos, pero espero que disfrueís con lo que os ofrecemos Luis y
yo.
He habilitado un nuevo gadget para los que nos seguís desde fuera de España, que sois muchos, pero os mereceis un reconocimiento. Supongo que esto no hace mucho con los juegos de palabras, pero pretendo haceros más fácil el camino.
Un saludo; Andrés.
Andrés mi más sincera enhorabuena por el blog.Gracias por tu honestidad y grandiosas palabras.
ResponderEliminarGracias Esther, yo también te felicito por tu blog, "Al final de la escapada", un blog que recomiendo a todos mis lectores.
ResponderEliminarCaronte aún está condenado al ostracismo en la Divina Comedia, no? su venganza quizá llegue algún día, esperemos poder leer tus libros antes de que eso ocurra.
ResponderEliminarMuy bueno Andrés.
Marina.
Gracias Marina, espero seguir raptando algún minuto de vuestro tiempo todos los días.
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